Lo que dicen las manos
Mis ojos
cansados de no verte
suplican a mis manos
hallarte en las palabras.
cansados de no verte
suplican a mis manos
hallarte en las palabras.
:-)
Sin ejercer fuerza alguna, sin prestar atención, sin pensar en ello, el agua me ha traído belleza y quietud. Aquí, ingrávida, parece que no hubiera caminado años por un desierto a solas.
